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Adiós al manual, bienvenido ChatGPT

Por : Elias Forero Illera
Internista reumatólogo. Rheumatologist internist. Internista reumatologista



14 Abril, 2023

https://doi.org/10.46856/grp.22.e166
Citar como:
Forero Illera E. Adiós al manual, bienvenido ChatGPT [Internet]. Global Rheumatology. Vol 4 / Ene - Jun [2023]. Disponible: https://doi.org/10.46856/grp.22.e166

"Un adelanto tecnológico que facilitará el ejercicio de la medicina y qué quizás deje a un lado a profesiones y profesionales que no se adapten rápido al cambio. ¿Qué pasará? "

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E- ISSN: 2709-5533
Vol 4 / Ene - Jun [2023]
globalrheumpanlar.org

Columna

Adiós al manual, bienvenido ChatGPT

Autor: Elias Forero Illera: Internista reumatólogo Correo: eforero64@gmail.com

DOI: https://doi.org/10.46856/grp.22.e166

Cita: Forero Illera E. Adiós al manual, bienvenido ChatGPT [Internet]. Global Rheumatology. Vol 4 / Ene - Jun [2023]. Disponible: https://doi.org/10.46856/grp.22.e166

Fecha de recibido: Marzo 25, 2023
Fecha de aceptado: Abril 5, 2023
Fecha de publicado: Abril 14, 2023


No están lejanas aun las épocas en donde los elementos mínimos necesarios para hacer un turno como residente, interno o estudiante eran en su orden: un bolígrafo (en mi país era muy popular uno llamado Kilométrico) un fonendoscopio y el manual de terapéutica. Cualquier otro implemento podía ser considerado suntuario. Hoy, gracias a los adelantos tecnológicos, los mínimos necesarios para hacer una guardia en urgencias se reducen a portar un teléfono móvil con conexión a internet y una buena taza de café.     

El frenético desarrollo de la tecnología de la información borró al bolígrafo de la faz de los hospitales. Hoy, hasta el más mínimo procedimiento debe ser digitado para que todo acto médico sea debidamente contado, auditado y cobrado. Cuán difícil puede ser conseguir un recetario y este elemento para escribir a mano una nota en los actuales servicios de urgencias. La famosa ilegibilidad de la letra del médico pronto será cosa de la historia.

El estetoscopio, símbolo de la medicina, que aún se resiste a desaparecer, pronto será reemplazado por ecógrafos manuales con visión en la pantalla del teléfono móvil. En “POCUS años el diagnóstico de falla cardíaca o de un soplo cardíaco será atisbado en la pantalla de un celular y no en el oído del médico.

Ni hablar del manual de terapéutica, este libro en formato de texto ya hace parte de la historia. Desde hace algunos años, de los teléfonos celulares se pueden bajar textos, guías de manejo y todas las revisiones que usted necesite para resolver las dudas sobre los casos en estudio. 

Aún así, faltaba la cereza del pastel. Un adelanto tecnológico que facilitará el ejercicio de la medicina y qué quizás deje a un lado a profesiones y profesionales que no se adapten rápido al cambio. Se trata de la inteligencia artificial (IA) (1,2 ) y OPENAI chat , el más reciente desarrollo de los chatbots (3). Este es un programa informático diseñado para simular conversaciones con usuarios humanos a través de texto o voz. 

Funciona mediante una combinación de algoritmos y bases de datos que le permiten procesar, interpretar y responder a las preguntas y comentarios de los usuarios. ChatGPT es el más desarrollado hasta ahora. 

Con este nuevo recurso tecnológico, los profesionales de la salud podrían disponer de un asistente en tiempo real con las siguientes ventajas: 

  • Acceso rápido a información médica: proporcionar información médica actualizada y precisa, lo que permite a los profesionales de la salud tomar decisiones fundamentadas en datos científicos.
  • Asistencia en el diagnóstico: ayudar a los profesionales de la salud en el proceso de diagnóstico al analizar síntomas y antecedentes médicos, sugiriendo posibles condiciones y enfermedades que se ajusten al cuadro clínico.
  • Seguimiento del paciente: apoyar en el seguimiento del progreso y estado de salud de los pacientes, proporcionando análisis y resúmenes de su historial médico.
  • Interpretación de resultados: asistir en la interpretación de resultados de pruebas y exámenes médicos, generando información sobre valores normales y anormales.
  • Atención personalizada: contribuir a mejorar la atención del paciente al brindar información específica y personalizada sobre su situación médica, lo que ayuda a los médicos a abordar las preocupaciones y preguntas.
  • Reducción de la carga de trabajo: aliviar parte de la carga de trabajo de los profesionales médicos al automatizar algunas tareas rutinarias, como la redacción de informes, el ingreso de datos o la programación de citas.
  • Apoyo en la toma de decisiones clínicas: ayudar a los médicos a evaluar opciones terapéuticas y considerar posibles interacciones entre medicamentos y efectos secundarios.

 

Es así como gracias a toda esta tecnología los médicos tanto en ejercicio como en formación dispondrían, a la vuelta de un clic, de todos los datos útiles para llegar a un diagnóstico y proponer un tratamiento. 

Surge entonces la pregunta: ¿tendrá la IA la capacidad de reemplazar a los médicos? 

Por ahora creo que la respuesta es no, pero sin dudas en todas las profesiones se tiene que poner la tecnología a trabajar a favor, de lo contrario también corremos el riesgo de salir sin retorno del llavero, como el bolígrafo, el fonendo y el manual de terapéutica. 

Los colegas que ejerzan la profesión en el futuro deberán desarrollar unas habilidades que se antojan más que necesarias, aquellas en donde la IA observa mayores dificultades en su implementación, como por ejemplo:

  1. Habilidad para comunicarse y establecer una relación empática con el paciente: los médicos deben desarrollar la capacidad de comunicarse efectivamente y establecer relaciones empáticas con sus pacientes, lo que les facilitará comprender mejor sus necesidades y preocupaciones.
  2. Desarrollar al máximo las capacidades semiológicas: la semiología es la ciencia del diagnóstico. En cualquier escenario para tener éxito en la atención de un paciente se tiene que partir de un diagnóstico correcto. El profesional debe ser capaz de hacer un interrogatorio exhaustivo y un examen físico completo que aporte la mayor y mejor calidad de datos.
  3. Aprender a tomar decisiones en escenarios complejos: aunque la IA puede procesar grandes cantidades de datos y ofrecer recomendaciones, en la medicina a menudo se toman decisiones en condiciones de incertidumbre. Los médicos deben aprender a sopesar los riesgos y beneficios de diferentes opciones de tratamiento y tomar decisiones considerando información emocional, social, económica y ambiental del paciente.
  4. Desarrollar habilidades de flexibilidad y adaptabilidad: la IA sigue un conjunto específico de reglas y algoritmos, y su capacidad para adaptarse a situaciones imprevistas o inusuales es limitada. En cambio, el ser humano con frecuencia enfrenta situaciones cambiantes y complejas en donde se requiere cierta flexibilidad y adaptabilidad que las máquinas aún no tienen.
  5. Desarrollar el razonamiento crítico y buen juicio clínico: El desarrollo de estas dos competencias le permite a los médicos evaluar entre otras cosas, la veracidad de la información médica y no médica. Porque no todo es color de rosa en esto del uso de la tecnología y el ejercicio de la medicina.

El problema estriba en que para obtener ese anhelado o escurridizo diagnóstico para luego formular un tratamiento correcto, los chatbots tienen que haber sido alimentados con datos y cifras válidas. Los chatbots, incluyendo el recientemente lanzado ChatGPT, basan sus respuestas en la información con la que han sido entrenados. Si se les proporciona información falsa, errónea o sesgada, es probable que generen respuestas incorrectas o engañosas. Los algoritmos funcionan igual con información correcta o inválida. Por tanto, antes de tomar decisiones clínicas, la información que proporciona, debe ser siempre evaluada, contrastada y validada por profesionales de la salud idóneos. 

En resumen, los avances tecnológicos han transformado radicalmente la forma en que los profesionales de la salud llevan a cabo sus prácticas diarias, brindando nuevas herramientas y recursos que facilitan el diagnóstico y tratamiento de enfermedades. A pesar de los beneficios que ofrece la IA y los chatbots, es esencial que los médicos no dejen de desarrollar las habilidades humanas, como la comunicación empática, el razonamiento crítico y la adaptabilidad, ya que estas son áreas en las que la IA aún no puede igualar al toque humano. Además, es importante recordar que la calidad de las respuestas proporcionadas por los chatbots depende de la precisión y confiabilidad de la información con la que fueron entrenados. Por lo tanto, es responsabilidad de los profesionales de la salud evaluar y validar cuidadosamente la información obtenida de estas fuentes antes de tomar decisiones clínicas. 

Al combinar la sabiduría y experiencia humanas con la capacidad de procesamiento de datos de la IA, los médicos estarán mejor posicionados para enfrentar los desafíos del siglo XXI y brindar una atención excepcional a sus pacientes

 

Referencias 

  1. Fajardo E, Graf C. Inteligencia artificial, ¿transformación de la reumatología? - Parte I. Global Rheumatology [Internet]. Pan American League of Associations of Rheumatology (PANLAR); 2022 Apr 21; Available from: http://dx.doi.org/10.46856/grp.21.e115
     
  2. Fajardo E, Graf C. Inteligencia artificial, ¿transformación de la reumatología? - II Parte [Internet]. Global Rheumatology. Pan American League of Associations of Rheumatology (PANLAR); 2022.. Available from: https://doi.org/10.46856/grp.26.e125
     
  3. Disponible en https://openai.com/blog/chatgpt 

 

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